CRÍTICA DE CINE: ENTER THE FAT DRAGON (2020)
Cuando se habla de Donnie Yen, a mucha gente le viene a la cabeza Duelo de Dragones (2005), Flash Point (2007) o la saga de Ip Man, papeles de tipo duro o más dramáticos. Pero Donnie ha hecho bastante comedia, o al menos ha añadido este género a su filmografía, sobre todo en sus inicios. Que protagonizase Enter the Fat Dragon, una comedia de acción que encima usase el título de un clásico de Sammo Hung, perteneciente a la Bruceploitation, podía no ser lo que mucha gente quería. Pero este cambio de tono le ha venido muy bien. Recordemos la recepción de Special ID (2013), por ejemplo, siendo una magnífica película, pero no tan bien vista por muchos fans del cine marcial oriental. Por suerte, el resultado final es una película que gana con cada visionado, un divertimento con grandes momentos marciales, humor y, claro está, un homenaje a Bruce Lee, aunque no un remake del clásico de Sammo que en España se tituló Le Llamaban Dragón Gordo (1978).
Para hablar de esta última película estrenada de Donnie (apareció en los cines hongkoneses a finales de enero de este año), hay que separar varios aspectos de la misma. Para empezar, como he dicho, no es un remake. Sólo se usa el mismo título y el aspecto rollizo del protagonista, algo que surgió para hacer un anuncio en 2015 donde podíamos ver a dos Donnies, uno gordo y otro delgado, y cinco años después, esta anécdota televisiva ha dado paso a este film donde conocemos a Fallon Zhu, un policía que verá su vida cambiar de rumbo cuando, tras detener a unos ladrones, provocando destrozos por medio Hong Kong, sea relegado al departamento de pruebas mientras que su novia, una actriz de televisión, le deja. Esto provocará que en seis meses supere los 100 kilos de peso, aunque tendrá una oportunidad de volver a la acción acompañando a Tokyo a un preso, y terminando por enfrentarse con la mismísima Yakuza. Nada que ver con la historia de ese fan de Bruce Lee que interpretó Sammo y que llegaba a Hong Kong para vivir aventuras y desventuras. Fallon es un personaje simpático, bonachón, pero que no ha perdido sus habilidades marciales, y todo el film tiene ese toque divertido para hacernos disfrutar durante la hora y media que dura. Junto a Donnie tenemos a Wong Jing, mítica figura del cine de Hong Kong, productor, actor y guionista, que cubre además todos estos aspectos en la película. Al parecer, su papel se pensó en ofrecer al propio Sammo, pero finalmente se desechó la idea. El villano de la función es el japonés Joey Iwanaga (Tokyo Tribe) y tenemos además a Masanori Mimoto (Hydra) y al joven Lin Qiunan, un joven campeón de Taekwondo con 16 años que debutó en el cine en 2016 con Kungfu Boys y que dos años después ya compartiría créditos con Donnie en Big Brother. Y es todo un acierto ya que, aunque tiene escasos momentos marciales, demuestra tener una técnica impresionante y al que tendremos que seguir de cerca. Podría seguir enumerando al reparto, como Louis Cheung, Niki Chow o Jessica Jann, amigo y jefe de Fallon, novia del protagonista y la intérprete que le acompañará por Japón respectivamente, sin olvidar a Naoto Takenaka como el Inspector de Policía nipón Endo, personajes esenciales en la historia pero que complementan a la estrella, un Donnie Yen que se nota que se lo ha pasado en grande durante el rodaje. Su personaje es aire fresco para Yen, quien además se parodia a sí mismo usando Duelo de Dragones y Flash Point como si fuesen entregas anteriores de esta película, llegando a repetir la secuencia de pelea en el callejón entre Donnie y Wu Jing de la primera, pero con Philip Ng, aunque casi ni se nota que es él. Sin duda es una forma de decirles a sus fans que es algo más que el badass de esos films.
Detrás de las cámaras tenemos a Kenji Tanigaki, amigo íntimo de Donnie y uno de los “culpables” del éxito del actor, que debuta como director (asistido por Aman Chang) además de encargarse del diseño de la acción junto al propio Donnie y Huan Yua, otro habitual en el cine de Donnie. Por ello, a nivel marcial, de primeras, prometía, y da exactamente lo esperado y más. Tenemos mucha acción, como la pelea en la furgoneta al principio de la película, o los diferentes enfrentamientos en Tokyo. Todos ellos cuentan con el equipo de especialistas de Donnie además de otros japoneses como Mimoto, un nombre que poco a poco va despuntando y que tiene una técnica muy buena además de ser un hombre sumamente cercano. A pesar de cierto uso de efectos digitales y de cables, las peleas son estupendas, no puedo decir otro adjetivo, alejándose del Wing Chun de Ip Man e incluso de Bruce Lee, que es el último punto a destacar de la película.
Mientras que la original de Sammo le convertía en un clon total del Pequeño Dragón, aquí las referencias a Bruce son menores. Se deja claro que Fallon es fan de Bruce, viendo sus películas en un momento dado del film, e incluso, en la pelea final, Donnie usa unos nunchakus, pero esquivando clonarle directamente. También podemos escuchar en muchos momentos el tema principal de El Furor del Dragón (1972), siendo el tono del teléfono del protagonista, y es aquí donde realmente aparece el homenaje a Bruce. En dicho film, Bruce se llama Tang Lung, literalmente Dragón de China, y viaja a Roma para enfrentarse a mafiosos, lo mismo que le ocurre a Fallon. Que se usen referencias exclusivas a esta película de Bruce es el homenaje real que Donnie rinde, convirtiéndose en una vuelta de tuerca a la base del argumento y trasladándolo a Japón, que, a su vez, son los villanos en Furia Oriental (1972) De esta forma, el homenaje al Pequeño Dragón es más sutil, consiguiendo que Enter the Fat Dragon no use en demasía la explotación de Bruce, a pesar de que la promoción ha incluido a Donnie con el mítico mono amarillo de Juego con la Muerte (1978)
Resumiendo, Donnie Yen consigue un personaje diferente, demostrando que puede hacer más cosas que repetir sus peliculones más actuales, llenando de estupendas secuencias de lucha la película, con ese clímax en la Torre de Tokyo donde usará los mencionados nunchakus contra sais. Una película que se podrá ver en el Festival Nits de Cinema Oriental de Vic a finales de julio y que esperamos que después consiga llegar a nuestro país, aunque sea en alguna plataforma de streaming para que los fans de Donnie y del cine marcial, disfruten de ella como se merece.
NOTA: 8
Enter the fat dragon肥龍過江
Sinopsis
Un policía recibe la tarea de escoltar a un criminal a Japón mientras atraviesa un momento personal complicado, algo que ha traído consigo un enorme cambio físico: ha engordado algún que otro kilo de más desde que lo dejó su pareja.